Hace unos días un grupo de estudiantes de hostelería tuvo la oportunidad de participar en un concurso de recetas de Save the Children que se celebró, nada más y nada menos, que en el Basque Culinary Center, otro de los organizadores. El concurso “Recetas para la Convivencia” es un proyecto de innovación educativa sobre la infancia migrante y refugiada que está financiado por la Agencia Vasca para la cooperación y el Desarrollo.

En todo el recito olía a confianza y se respiraba valentía, ya que se trataba de eso, de cocinar recetas de valores. Para ello la mecánica del concurso establecía como cada uno de los ingredientes posibles estaba asociado a un valor. Así que los alumnos cocieron empatía, amasaron solidaridad, emplataron igualdad, cortaron justicia y sazonaron con mucha dignidad. Todo bien regado de solidaridad e integridad.

Con cada uno de los platos presentados se explicaba la elección de los valores por parte del alumnado y se daba a probar al jurado, que deliberó para entregar los diplomas y premios correspondientes. Elena Arzak, con la que todo el mundo quería sacarse una foto, y Aitziber San Román, concejala del ayuntamiento de Donosti, fueron las encargadas del reparto.

Todo el alumnado de Peñascal se vino para casa con algo más importante que el primer premio, una experiencia increíble en la primera universidad de gastronomía del mundo, en la que también comieron, y los valores para cocinar más recetas de convivencia, que son los ingredientes principales de esta historia.